lunes, enero 22, 2007

Cierto, nada que decir

Se ve que no, que no hay nada que decir.
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Que nada retuerce nada. Que nadie activa ninguna parte.
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Ese silencio eterno de los otros, bienvenido con sonrisa irónica, otra vez. Que por otra parte es la constatación de la soledad en mayúsculas. La que siempre me da la razón. La que os traerá la confirmación el día de vuestra muerte, a todos los que pensáis que no.
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Y decimos que queremos salvar el mundo, cuando no somos capaces ni de proteger, los más avispados, un poquito de emoción. Unas pocas palabras ni siquiera ciertas del todo.
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Porque hay que reconocer que salvo contadas excepciones, mientras tu amigo saltaba a la cascada, tú estabas seguramente haciendo el tonto, perdiendo parte de tu tiempo, durmiendo como mucho.

8 Comments:

At 22 enero, 2007 13:11, Anonymous Anónimo said...

...o preocupándote por él... porque tú (yo), habrías hecho lo mismo.

 
At 22 enero, 2007 13:29, Blogger . said...

esa es una de las excepciones.

generalmente te preocupas luego, una vez ya ocurrió.

y no es sólo culpa tuya, el que no haya comunicación.

si es que entendí bien tu comentario...

saludos

 
At 22 enero, 2007 13:48, Anonymous Anónimo said...

No. Ni la culpa es mía ni la obligación es suya.

Sólo hay que ponerse en el lugar del otro.

...pero nuestra soledad no nos lo permite, ¿o sí puede hacerlo? (pregunto para conocer tu opinión)... si es que puede, parece una máxima más parecida al dios del nuevo testamento... más... ¿happy?

 
At 22 enero, 2007 22:53, Anonymous Anónimo said...

Si te sirve de algo, cada día pienso un ratito en ti. A veces simplemente pregúntandome que harás, a veces intentando descubrir lo qué pensarías tú de algo que yo oigo, veo o leo, y muchas veces para llenar espacios de soledad que se van abriendo sin prisa pero sin pausa, como ya sabes.
Siento no decírtelo más a menudo. Rectifico; no lo siento por ti, porque sé que no lo esperas. Mejor decir que lo siento por mi, por no atreverme a decirlo. Esto y muchas otras cosas.
Saludos y saludos, por si hacen falta.

 
At 23 enero, 2007 17:13, Anonymous Anónimo said...

si, si, todos pensamos en ti..

 
At 24 enero, 2007 01:26, Anonymous Anónimo said...

anonimos!! dad la cara, q me quedo con la intriga!!!

 
At 24 enero, 2007 03:12, Blogger . said...

untitled one: sí. claro que nos lo permite. pero menos de lo que podemos llegar a dominar. tanto por si querríamos más como por si nos gustaría que fuese aún menos.

primer anónimo: sí. claro que me sirve de algo. para lo mismo que nos sirven a todos estas cosas no? rescatar algo de emoción como poco...

 
At 24 enero, 2007 13:01, Blogger Ben Clark said...

El poeta rescata la emoción, la congela, la mata -si se quiere- para que sea inmortal. El poeta atenta a diario contra el silencio del mundo, porque de niño escuchó decir que el mundo al girar hacía ruido, un ruido insoportable que no escuchamos porque nacemos, vivimos y morimos inmersos en él. El poeta sabe que no arreglará nada, su victoria es su fracaso diario, la gloria de saber que está fracasando en este momento, siempre, no que ya ha fracasado.

 

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